¿Quién no ha tenido vecinos que realizan fiestas hasta altas horas de la madrugada? ¿Quién no ha tenido vecinos que hacen segundo piso y violan el derecho aéreo del otro vecino? ¿Quién no ha tenido vecinos que estacionan su auto justo en el patio del otro vecino sin permiso y se enoja porque le dice que no le corresponde poner el auto ahí?
Todos hemos tenido algunas veces, vecinos molestos que han afectado el ambiente de la villa o población. Thomas Hobbes propone una solución frente a este conflicto.
Thomas Hobbes propuso el «sistema contractualista», es decir, un sistema de sociedad que permite realizar un contrato social entre el ciudadano y el Estado.
Este acuerdo se trata de que las personas ceden su libertad al Estado a cambio de protección frente cualquier situación que viole la libertad de las personas, porque los seres humanos son malos y egoístas por naturaleza y necesitan un ente llamado «Estado» para controlar su naturaleza y evitar que haya una anarquía, ya que “si dos hombres cualesquiera desean la misma cosa, que, sin embargo, no pueden ambos gozar, devienen enemigos; y en su camino hacia su fin (que es principalmente su propia conservación, y a veces su delectación) se esfuerzan mutuamente en destruirse (Hobbes, 2015, p.128).
Esta cita se puede explicar a través del siguiente ejemplo: Si hay dos vecinos discutiendo y no llega el Estado, lo más probable es que se puedan matar, porque el ser humano es malo por naturaleza. Es por esta razón, que debe estar presente el Estado en todos lados para resguardar la seguridad de aquellas personas que quieren vivir en paz.
Es decir, lo que propone Thomas Hobbes es que el Estado tome su responsabilidad en responder del auxilio de los ciudadanos que sufren por vecinos inconsciente y que vaya al rescate de ellos. ¿Qué hace el Estado de Chile? Hace muy poco para solucionar temas vecinales, porque, primero si hay un conflicto, se llama a Carabineros, pero ellos solucionan lo inmediato, no lo de largo plazo.
Segundo, si llama a la Municipalidad, esta se demora un montón para solucionar el conflicto, algo propio de la burocracia estatal.
La justicia vecinal creada por el Estado es una buena solución, pero aun así es muy burócrata para poder llegar a un acuerdo con vecinos que algunas veces son muy prepotentes y ocupan la violencia psicológica como física para violar la armonía de la villa o población…
Y ¿usted vecino que opina? ¿Cómo solucionaría los problemas vecinales?
