Es martes 8 de noviembre y la gente que transita por la Plaza de Maipú entre las 11 y 13 horas, mira con cara de asombro. El paisaje está cambiado y extraño: hay mimos regalando dulces y flores; los cables tienen nubes colgadas, hay funcionarios municipales portando pancartas y una bella música, interpretada en vivo, suena de fondo.
Alberto Pizarro, Coordinador de Espacios Públicos pregunta si la idea se entiende. Recibe varias respuestas, pero al cabo de un rato sonríe. La gente está feliz. Extrañamente contenta.
La Municipalidad decidió en el Día Mundial del Urbanismo, realizar una intervención en el centro de la comuna para reclamar y levantar un tema: es horrible como lucen los cables en desuso de las empresas de telecomunicaciones.
Es verdadera basura flotante que ensucia el panorama, entorpece la visual y vuelve menos amigable nuestra comuna. Lo peor es que no existen normas ni leyes que les permita a los municipios exigir que se retiren dichos cables.
El Alcalde de Maipú, Alberto Undurraga, señaló que en algunos casos más de la mitad de estos cables no presta ninguna utilidad convirtiéndose en contaminación visual. “Esta es una de las injusticias de la ciudad que debe cambiar. Una sociedad equitativa se construye no sólo con políticas sociales sino que también desarrollando una ciudad igualitaria, una ciudad justa”, recalcó. Además se mostró contento por el recibimiento que tuvo la actividad en los vecinos.
Fue así como la gente que cruzó el semáforo de Avenida Cinco de Abril con Pajaritos, arterias por las cuales pasan más de 40 mil personas al día, lo hicieron sobre una alfombra roja.
La situación es grave si se considera que incluso hay postes que no se usan y ahí están, quitándole espacio a lo que podrían ser lindos árboles. Por ello tenían mucho sentido carteles que decían “contaminación visual: cada poste un árbol menos”, “el 70% de los cables que ves es basura en el aire”, “aquí la preferencia es de los peatones”.
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