Hace unas semanas atrás TVN realizó un reportaje acerca de las paradas ilegales que tienen los colectivos en la plaza de Maipú. Esta nota de prensa refleja que los colectiveros se toman ilegalmente la esquina de la Av. 5 de abril con Pajaritos, tapando así una vía de la avenida y el paradero del Transantiago que no permite que los pasajeros tomen adecuadamente la micro.

Esto provoca que los usuarios del transporte público tomen el bus urbano en la segunda vía de la calle, siendo que este acto es sumamente peligroso porque puede provocar accidentes de tránsito. La municipalidad y Carabineros ha realizado pocos esfuerzos para radicalizar o poner orden frente a las malas prácticas de estos colectiveros.

Pero esta columna no se va a tratar de criticar las casi nulas políticas de transporte de la municipalidad, sino va a hablar de la irresponsabilidad de nosotros mismos como maipucinos que ayudar enormemente a contribuir que estas irregularidades que ocurren en nuestra comuna.

Esto nos hace preguntar  si estamos comprometidos como residente de la comuna de Maipú en ayudar a ordenar nuestra ciudad.

Nosotros creemos que efectivamente no estamos comprometidos en mejorar nuestra calidad de vida, por el hecho que la gran mayoría de la población es individualista, ya que cada uno de nosotros nos interesa nuestro propio bienestar. Esta visión individualista nos hace olvidar que no existe un respeto por el otro ni menos que la ciudad tiene un orden.

Pero cómo hace la Municipalidad de Maipú que haya respeto hacia el transporte público. Lo que hace el municipio es poner cada cosa en su lugar y que haya una coexistencia pacífica entre los medios de transporte, es decir, que cada ente tenga su espacio en la ciudad.

Alguien podrá preguntar: ¿por el Transantiago tiene más prioridad que los taxis? La respuesta es porque toman más cantidad de personas.

Todo tiene su orden y lógica. Pero, si seguimos con este individualismo, esto no permite que las cosas funcionan como corresponde.

Es decir, tanto la municipalidad como Carabineros pueden hacer todo lo que esté a su alcance eliminar estas irregularidades, pero si nosotros como ciudadanos violamos estos esfuerzos de las autoridades, las energías que realizan las entidades estatales serán en vano.

Obviamente, la municipalidad debe dar una solución frente a esta situación de tránsito, pero también depende de nosotros hacer respetar este orden para que haya una coexistencia pacífica en nuestra comuna.

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