Una investigación de Ciper reveló que 174 zonas ocupadas viven en espacios de: tiroteos, comercio y consumo de drogas, narcotráfico y abandono policial. De ellas, 8 pertenecen a nuestra comuna.
Esta semana, el Centro de Investigación Periodística (CIPER) publicó una investigación que estuvo realizando en terreno, conversando con distintos funcionarios de servicios de correos, deliverys, empresas eléctricas y ambulancia. ¿Por qué con ellos? Debido a que por su labor, estos trabajadores son quienes suelen sumergirse en las calles más abandonadas por la presencia policial.
El reportaje reveló un total de 174 zonas ocupadas que tendrían en «jaque» a los servicios que intentan adentrarse, debido a la peligrosidad que conlleva.
Entre los relatos, está el de un cartero con 23 años de experiencia, y contó que una vez en Cerro Navia se produjo un tiroteo en el que él estaba presente. “Yo ya me gané un respeto, porque a estos muchachos de las pandillas los conozco desde que estaban en la guata de la mamá”, comentó a CIPER, dejando en claro que los carteros nuevos “no duran”, porque son asaltados por aquellos que viven en el sector, y que no los reconocen.
Zonas de Maipú
Dentro del conjunto de sectores identificados como peligrosos por la presencia de tiroteos, comercio y consumo de drogas, narcotráfico y abandono policial, 8 están en Maipú:
Barrio Esquina Blanca: Barrio ubicado cerca del estadio Santiago Bueras, y a unos kilómetros del Templo Votivo de Maipú, muestra dificultades en el acceso de algunos servicios, tales como: funcionarios de electricidad y correos.
Población San Luis: Con una población de 17 mil habitantes (3% de Maipú), es una de las zonas con una alta complejidad para que personas externas puedan ingresar.
Se identificaron cuatro servicios que tienen dificultades para ingresar a la zona: eléctricos, funcionarios del SAMU, de correos y delivery. A pesar de que tienen un cuartel de policía a 0,09 km de distancia, la zona está bastante abandonada por la presencia policial.
Población Santa Carolina: Son cerca de 4 mil personas las que viven en este sector, sin embargo, también ha presentado dificultades para dejar entrar a Delivery, correos y personal eléctrico.
Villa El Abrazo: Esta villa a pesar de presentar solo dos prestaciones con dificultades de acceso —luz y correo—, llama la atención por lo alejado que están unos de los servicios esenciales para una comunidad.
Villa El Abrazo presenta el cuartel de policía más cercano, a 2,57 kilómetros de distancia. Mientras que la estación de metro más cercana, está a más de 4 kilómetros —estación Plaza Maipú—.
Villa Esperanza l y ll: Estos dos sectores, con cerca de 3 mil habitantes cada uno, presentan obstrucciones de servicios de delivery, luz y correo. También al igual que El Abrazo, tienen la estación de metro más cercana a casi 4 km de distancia —estación Plaza Maipú—.
Villa Grecia: con una población pequeña de cerca de 700 habitantes, presenta problemas en acceso de luz y correo.
Por último se encuentra la Villa Matucana: con 300 habitantes aproximadamente, el cuartel policial más cercano se encuentra a 1,37 km de distancia. Mientras que también se presentaron problemas en el acceso de correos y delivery.
Cuando se habla de complicaciones al entrar a estas zonas, se refiere a que los funcionarios de estos servicios mencionados presentan vulneraciones de su seguridad personal, debido a que los asaltan, se roban los autos de correos y especialmente los bienes que se adquieren de forma online y que se entregan a domicilio.
Sin embargo, estas condiciones según la socióloga, Lucía Dammert, no deberían estigmatizar los sectores, debido a que son problemas que no conlleva solamente un factor determinante, sino varios.
La especialista que conversó con el medio, señaló que existen cinco factores que están siempre presente en las zonas más conflictivas:
- Acceso y consumo de alcohol y drogas.
- Problemas de salud mental no tratados
- Exposición a la violencia intrafamiliar o de terceros en edad temprana.
- Deserción escolar.
- Desempleo.
“Esa serie de condiciones es la que lleva a la gente a tomar carreras criminales. Y eso no lo soluciona una comisaría”, señaló la académica en el reportaje.
