Hace unas semanas, el Liceo San Pedro Poveda de Maipú realizó un histórico viaje a Miami, Estados Unidos, para competir en un certamen de básquetbol internacional de primer nivel.
Uno de los responsables de que los maipucinos participaran fue Alfonso Berríos, profesor de educación física del colegio Alberto Widmer, quien cuenta con un magíster en gestión deportiva y liderazgo educacional. Además, tiene formación en liderazgo educativo en la universidad de Deusto, España.
Es el representante oficial en Chile de World Soccer Fundation y World Basketball Fundation, dos entidades que realizan torneos internacionales de fútbol y basquetbol en Estados Unidos y España.

El profesional comenzó a llevar estudiantes hasta Miami en 2014, cuando conoció a los organizadores de la Miami Cup. En aquella oportunidad, gracias a su pasado en el fútbol, Alfonso fue designado a cargo de la «selección chilena de fútbol barrio», cargo que mantiene hasta el día de hoy.
A partir de ese momento, el profesor comenzaría a llevar a diferentes colegios y clubes de todo el país, quienes se miden en un torneo internacional contra equipos de todo el continente. 26 alumnos del Alberto Widmer fueron los primeros en representar a Chile en 2015.

Con la intención de explicar y profundizar más sobre su gestión y sobre la importancia de los proyectos en la etapa de formación de deportistas, Alfonso Berríos decidió hablar con La Voz de Maipú.
¿Cuántos niños llevas anualmente?

Comenzamos en 2015, con 26 alumnos del Widmer y ahora llevo un par de años pudiendo llevar más de 100 de las categorías sub12, sub14, sub16 y sub18. Este año, por ejemplo, también se sumaron niños del San Pedro Poveda para jugar un torneo de Basquetbol en Miami, lo que es súper positivo para ellos porque en Estados Unidos está la NBA.
¿Sólo van a competir o tienen la posibilidad de realizar más actividades?
Los niños tienen la posibilidad de representar a Chile Fútbol Barrio y Chile Básquetbol Barrio. También, tratamos de que no estén todo el día en el hotel, los sacamos a conocer Miami Beach, el centro de la ciudad, vamos a conocer diferentes estadios de fútbol, tenis, etc.
En Basquetbol, tuvimos la novedad de que se está jugando la NBA y tres de los niños pudieron salir con jugadores de los Miami Heats a cantar el himno de Estados Unidos. Entonces, ese tipo de actividades transforman el viaje en algo muy enriquecedor y que les permite ver otra perspectiva de vida.
¿Qué es lo que más valoran los niños que viven esta experiencia?
Lo principal, es que alrededor de la mitad de los niños que hemos llevado han ido becados, o sea, no han tenido que pagar por el viaje. Desde que esto partió acá en Maipú, hemos llevado a niños de Iquique, La Serena, Vallenar, Coyhaique o Aysén.
Muchos niños son de escasos recursos, que no habían tenido la oportunidad de salir del país, por eso el objetivo es llevar a muchos niños afuera, para que vean otra perspectiva de vida, jugando contra otros países, concentrando como lo haría un deportista profesional en un hotel y haciendo amigos de diferentes países.
¿Cómo logran financiar estos viajes?
La participación en estos torneos se sustenta gracias a recursos personales y comunitarios. Estos viajes se logran gracias al esfuerzo de padres, colegios, clubes, empresas o autoridades, que nos ayudan a reunir los fondos para sustentar los viajes, la hotelería, comida, tour y la indumentaria.
Con el paso de los años, hemos tenido muchas reuniones con alcaldes, concejales y coordinadores regionales que nos han ayudado a llevar niños, también hemos recibido apoyo de los gobiernos y municipalidades. Por ejemplo, en 2015 recibimos ayuda de Vittori para vestir a los chicos, y en 2021, los chicos que viajaron en plena pandemia fueron los primeros menores de 15 en ser vacunados por la vacuna Pfizer. En aquella oportunidad, el ministro Rodrigo Delgado nos autorizó a salir del país para ir a disputar el torneo.
A lo largo de los años el apoyo de autoridades ha sido transversal, porque hay una seriedad y compromiso en el proyecto.
En el caso de Maipú, ¿cuántos jóvenes de esta comuna has podido llevar?
Bueno, esto comenzó acá en Maipú con el Alberto Widmer, que ha podido viajar en más de una ocasión, también ha ido la selección de Maipú sub17, ahora último el Liceo San Pedro Poveda y en algunas oportunidades han ido diferentes niños de la comuna que representan al país, pero que son de distintos colegios o clubes.
En total, Hemos llevado a más de mil niños y jóvenes a Estados Unidos en estos diez años.

¿Crees que estas instancias son muy escasas en Chile?
Sí, lamentablemente acá en chile, apoyan a los deportistas cuando ya son exitosos, pero en su etapa de formación no reciben esa ayuda. Entonces, lo que intentamos hacer nosotros es dar la oportunidad a los niños cuando no hay resultados.
Este tipo de proyectos están enfocados en niños en edad de pre adolescencia, que no pertenecen necesariamente al mundo del alto rendimiento. Es aquí donde hay un vacío social en cuanto al apoyo e inyección de recursos, ya que las becas y subvenciones estatales están enfocadas en lo netamente competitivo.
¿Crees que habría una solución para esa problemática?
Se podría proponer que este tipo de proyectos puedan ser subvencionados quizás por el Gobierno Regional, considerando que yo como fundador de esta iniciativa ya cuento con la experiencia necesaria, llevando a más de 1.200 personas a competir al extranjero, reinsertando personas con problemas sociales, sacándolos de flagelo de la droga, etc.
Con ese apoyo, a través de un financiamiento a nivel gubernamental, le podríamos dar un foco mucho más social y transversal, llevando a niños vulnerables de varias comunas, para que puedan vivir la experiencia de entrenar, prepararse, competir y vivir un viaje internacional a través de la práctica del fútbol o el básquetbol. Al mismo tiempo, poder entregarles la oportunidad de ser vistos por reclutadores de universidades y de postular a becas deportivas.
¿Consideras que la experiencia podría ser una oportunidad incluso de profesionalizarse para los chicos?
He llevado niños que están jugando, que están estudiando y otros que con el viaje se han ido a trabajar a Estados Unidos porque vieron otra realidad.
Van muchos scouting de universidades y equipos profesionales que se acercan a los apoderados o a los profes para becar a los niños. Sólo le exigen rendir el TOEFL para que pasen a una prueba masiva de jugadores en Nueva Jersey, en una especie de draft.
También hay una agencia que asesora a los jóvenes para ganar becas en universidades de Estados Unidos, entonces las oportunidades y beneficios son múltiples.
De los niños que yo he llevado están, Julián González de Audax italiano, Diego Salvia de Brujas de Salamanca, Matías Bittner que está en Unión Española, Zacarías Abuhadba de Antofagasta, Joaquín Barrientos de Santiago Morning, Matías Pineda de Santiago Wanderers, Diego Bermúdez en Universidad Católica, Vicente Sandoval que está estudiando en Estados Unidos, Alonso Tapia de Deportes La Serena y Demian Araya que está en Coquimbo Unido, entre otros.
Me imagino que tu misión ahora es que este proyecto siga creciendo
Claro, mi objetivo es poder llevar cada vez más niños por año, que no tengan que pagar por el viaje y llevar al menos un equipo por región. Desde el 6 al 13 de julio ya somos más de 120 personas confirmadas, van 48 de Iquique, 42 de la selección sub 13 de Vallenar y 25 personas del Deportivo Maipú sub16.
¿Qué pueden hacer los colegios o clubes que estén interesados en realizar estos viajes?
Si hay interesados, los colegios o clubes de Maipú tienen que tener la disposición de querer hacerlo y evaluar la posibilidad de reunir los fondos para viajar. Si vamos a llevar a niños de un colegio, la institución debe facilitar la instancias para que ellos puedan reunir los fondos. Es lo único que les pido, una completa disposición en querer armar un proyecto para que los niños viajen.
Desde la humildad me gusta señalar que la persona que lleva a los niños no es un empresario, es un maipucino y los colegios no tienen porque ser de Las Condes o de La Dehesa para ir a competir a Estados Unidos.
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