– ¿Aló?
– Hola, Macarena, ¿Cómo estás?
– Ay, llorando de felicidad…
Esta semana Macarena Rojas, dirigenta del Club de Fútbol Cooperativa Cerrillos, anunció la buena noticia que le llegó desde su Municipio en Cerrillos: La histórica cancha de la agrupación deportiva no se va a tocar.
Se trata de un extenso perímetro emplazado dentro de la jurisdicción de la comuna vecina que en realidad le pertenece a la Municipalidad de Maipú, pero que en 1988 esta se la entregó en comodato al club (clic aquí) y, desde entonces, ha sido usado generación tras generación como punto de encuentro familiar y deportivo.
El problema comenzó hace un par de años cuando, sin aviso previo, funcionarios de Maipú empezaron a ser vistos en el lugar haciendo un estudio de suelo, debido a que se había decidido unilateralmente que ahí se ubicaría un proyecto de viviendas sociales.
“Nos entregaron un plano y nos dijeron que las casas se tenían que construir ahí sí o sí por un tema del plan regulador, pero nosotros sabemos que no es tan fácil llegar y decir ‘ya, aquí vamos a hacer casas’”, contó Macarena en una anterior oportunidad.
La angustia, la pena y la rabia por la situación movilizaron todo este tiempo a la dirigente junto a su esposo y presidente del club, Franco Núñez, en representación de las decenas de familias que son parte de la agrupación deportiva y del lugar desde hace décadas.
Buscando ayuda y respuestas, ya que consideraban inconcebible que ni siquiera se hayan molestado en preguntar. Consiguieron el apoyo del mismo alcalde de Cerrillos, quien aseguraba que haría lo posible por resguardar lo que vendría siendo “la última cancha de barrio” de su comuna.
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El proyecto de Maipú, realizado en conjunto con el Servicio de Vivienda y Urbanismo Metropolitano (Serviu), aseguraba desde la Dirección de Desarrollo Comunitario que la cancha se reubicaría, lo que finalmente había sido incluido en los planos, pero en dimensiones y condiciones mucho más limitadas. Definitivamente no iba a ser lo mismo.
Fue ante la constante insistencia de los vecinos y la presión desde la Municipalidad de Cerrillos lo que finalmente trajo resultados, pero todo mediado por Serviu, porque a pesar de los numerosos correos y oficios dirigidos a la alcaldesa Cathy Barriga para hablar directamente con ella el problema nunca fueron contestados.
«El primero de diciembre fue un día muy especial para nosotros. Después de luchas, portazos en la cara, humillaciones, dejar los pies en la calle, a mis hijos encargados. Esto último fue lo que más me marcó, pero por ellos, su felicidad y muchas cosas más hoy con lágrimas en los ojos puedo decir que lo logramos», sentenció Macarena, emocionada.
De momento se ha informado que la cancha no será intervenida en ningún otro sentido, ni siquiera de mejoramiento, por lo que aún queda pendiente qué hará el Municipio de Cerrillos al respecto y si, finalmente, el terreno será traspasado a dicha entidad.
