El cambio de hora en Chile se lleva a cabo dos veces al año: una para pasar a la época de verano y otra para el invierno, y dependiendo de la época, los relojes se deben adelantar o atrasar una hora.
Las modificaciones se realizan siempre en abril y septiembre, y la idea es reducir el consumo de electricidad a nivel residencial para utilizar de manera más eficiente los tiempos de sol en las distintas épocas.
Así es como este sábado 1 de abril comienza el horario de invierno, «cuando todos los relojes se deberán retrasar en una hora al marcar las 23:59 entre las regiones de Arica y Parinacota y Aysén», detallan en la página del Gobierno, desde donde también recalcan que «este cambio de hora no incluye a la Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, zona que continuará con la hora de verano de manera indefinida».
Por lo tanto, la mayoría de los chilenos deberán estar atentos y atrasar 60 minutos su reloj cuando sean las 23:59 del día sábado.
Proceso de consulta sobre cambio de hora
El Ministerio de Energía realizó un proceso de consulta a diversas instituciones públicas relacionadas con salud, educación, transportes, agricultura, telecomunicaciones, seguridad, energía, economía, entre otros, a fin de establecer las modificaciones a la hora oficial hasta el primer sábado de abril de 2026.
No obstante lo anterior y si fuera necesario, los ministerios del Interior y Energía están disponibles a evaluar una eventual modificación para el periodo comprendido entre septiembre de 2023 y abril de 2024.
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