En la obra “Ética para Nicómaco“ el filosofo griego Aristóteles dice que: “Cualquiera puede enfadarse, eso es algo muy sencillo. Pero enfadarse con la persona adecuada, en el grado exacto, en el momento oportuno, con el propósito justo y del modo correcto, eso, ciertamente, no resulta tan sencillo.“
Por cierto la frase es un guiño a la crítica, la cual siempre tiende a ser destructiva. Por lo general el arte de criticar se acompaña de desprecios, sarcasmo y dosis altas de ironías.
Leo en las redes sociales que la iniciativa del candidato de la Alianza para alcalde de Maipú: Joaquín Lavín León y su esposa, Cathy Barriga, no ha caído nada de bien entre algunos vecinos.
Muy bien: iré contra la corriente. Defenderé la táctica utilizada y me prepararé para recibir los ataques de los “trolls”. Acá va
El tiempo juega en su contra. Su rival más directo es Christian Vittori quien aparte de gozar de la tribuna que le permite el ser concejal por Maipú, ya ha ganado dos primarias y por varios sectores de la comuna, su imagen aparece en posteras y monumentales que lo ponen al nivel de un superhéroe. Sigamos sumando: Carlos Richter, concejal de RN, es quien tiene una de las redes más amplias en el mundo social, y de momento, no las ha compartido con Joaquín Lavín León.
Carece de operadores que conozcan Maipú, pues Jorge Durán es muy proactivo, pero aún no aterriza en la comuna. ¿Qué hacer? ¿Cómo tratar de arrancar una campaña?. Lo dijo un profesor de la comuna en una columna criticona “a falta de pan, buenas son las tortas”.
La primera red a la que Lavín está echando mano es a una red en la que pocos se mueven con holgura: las redes sociales. En este caso su esposa tiene miles de seguidores en Facebook. Por ello la idea me parece correcta. ¿Necesita recorrer la comuna, conocer las personas y sus problemas? Pues ofrezcamos una torta, a cambio de que nos reciban con una taza de té. La idea es sociabilizar y lo consiguen muy bien.
TORTA POR TÉ EN PRIMERA PERSONA
Fue una casualidad. La familia Lavín Barriga llegó hasta una sede social a escasos metros de mi oficina. No lo pensé y armado con la cámara de fotos, partí a presenciar la magia. El Centro de Madres Yolanda Vergara de Inda, aceptó el desafío e invitó a la pareja.
Ellos andan con su pequeño hijo, quien es inquieto y saca sonrisas. Es regalón y Lavín me comenta que se llama Joaquín “es el cuarto Joaquín Lavín”, me dice orgulloso de la tradición familiar.
Las dueñas de casa están fascinadas con la belleza y simpatía de Barriga. Ella recorre, ofrece torta y abraza a su pequeño. Pide ayuda pues andan en busca de arriendo: quieren vivir en la comuna en la cual Lavín sueña con dirigir.
Y la dinámica es buena: Lavín aún no tiene aprehendidos los tiempos de la política. Es tímido, se mueve lento y mira mucho. Sonríe a veces un tanto nervioso. Pero ahí está, dándose a conocer. Conversa con cada vecina, las escucha, a ratos les pregunta. Y es que ¿cómo va a hacer un programa de gobierno local sin antes escuchar a los vecinos?
De pronto la cámara de La Voz se queda pequeña. Aparece un equipo de SQP y Barriga intercede para lograr dar a conocer a Lavín en unos de los programas más consumidos por la dueña de casa C3 de Maipú.
Los guía Jacqueline Canales, hija de un ex concejal DC por Maipú. Barriga se las arregla para lucir bella, a pesar que afuera llueve a cántaros. Es hora de irse, otros vecinos les esperan: al parecer “la torta” hoy vilipendiada es un muy buen comienzo, por mientras que las máquinas políticas son “aceitadas” y los concejales de la Alianza en Maipú, deciden dar el paso y ponerse al lado de un candidato que tiene un gran mérito: dijo que sí, donde otras figuras más prominentes, curtidas en política y con opciones de triunfar, dijeron que no por miedo al fracaso.
Está claro que no puede basar su campaña en andar comiendo tortas, sin embargo el joven Lavín demuestra que es capaz de echar mano a los recursos que tiene a su alcance.
Está lejos de Vittori, pero en política nada está dicho hasta que terminan los conteos de los votos. Además y como ya lo escribí en otra ocasión, hay tortugas que le han ganado carreras a las liebres.
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