En Chile, toda persona mayor de 18 años es considerada donante de órganos y aún nos cuesta hablar de ello. Se trata de un tema que suele estar rodeado de dudas, y en el marco de la conmemoración del Día Nacional del Transplante buscamos despejarlas en conversación con Cristina Soto, enfermera encargada de la Unidad de Procuramiento del Hospital El Carmen de Maipú.
Antes de continuar, algunos datos clave según el Instituto de Salud Pública:
- Los órganos y tejidos que pueden ser trasplantados desde un donante en muerte cerebral son: corazón, pulmones, hígado, páncreas, riñones, intestino, córneas, huesos, y piel.
- Sólo del 2% de los fallecidos de un país cumple criterios de muerte encefálica, que es la condición que exige la ley para ser donante.
- En el caso del donante vivo, se puede donar riñón, parte del hígado, tejido óseo, piel y membrana amniótica.
- En el caso de menores de 18 años, sólo los padres o el representante legal pueden autorizar la donación.
- Si la familia se opone a la donación, y el fallecido no se encuentra en el Registro Nacional de No Donantes, el equipo de Procuramiento conduce a respetar la voluntad de su familiar de ser donante, por eso resulta fundamental conversar en familia este tema.
- Existe la posibilidad de inscribirse en el Registro Nacional de No Donantes en caso de no querer ser donante.
En el Hospital El Carmen de Maipú de Maipú desde 2022 existe la «Unidad de Procuramiento» que es coordinada por Soto, que realiza un proceso enfocado en la detección oportuna de un posible donante, quien por su condición compleja de salud podría transformarse en donante efectivo.
En Chile, te transformas en donador de órganos de manera automática a los 18 años, ¿consideras que aún hay oportunidades de mejora en la información que se difunde al respecto?
En general, creo que todavía hay mucha desinformación y esto se evidencia principalmente cuando el equipo de procuramiento realiza el «abordaje familiar», donde la familia además de estar pasando por un proceso muy doloroso tras recibir la noticia del fallecimiento de su familiar (que es inesperado en la mayoría de los casos), desconoce el tema de la donación de órganos y por lo mismo no saben cuál pudo haber sido la voluntad de su familiar con respecto a este tema.
En ese difícil momento, la familia entra en la dinámica de pensar «¿qué habría querido?» o se ponen en situaciones alentadas por la desinformación o los mitos en relación a la donación de órganos.
La Ley en nuestro país establece que todo mayor de 18 años es donante, a menos que en vida, y de manera formal a través de una declaración de voluntad, haya manifestado lo contrario. Si nosotros nos encontramos frente a un caso de alguien que no está inscrito en el Registro Nacional de No Donantes, se da por entendido que es donante, por lo tanto, la familia debe respetar esa voluntad.
Aquí resulta importante mencionar que la única condición que permite ser donante es si la persona fallece por criterio neurológico o más comúnmente conocida como muerte encefálica, que causa la pérdida irreversible de todas las funciones cerebrales y eso en términos de porcentaje es muy bajo, es decir muy pocas personas presentan esta condición, además que para ser donante se deben cumplir ciertos criterios, por esto se evalúa la edad, enfermedades crónicas que tenga el paciente, entre otros factores, lo que reduce aún más las posibilidades de que todos puedan ser donantes.
¿Cómo funciona la donación de órganos en el Hospital el Carmen?
Nosotros trabajamos en red con la Coordinación Local de Procuramiento del Servicio de Salud Metropolitano Central, que a su vez tiene dependencia de la Coordinación Nacional de Procuramiento y Trasplante.
En particular, en el Hospital El Carmen nos preocupamos de que todos los procesos se cumplan según lo establecido en la ley. Nosotros trabajamos en la identificación temprana de pacientes que puedan cumplir condiciones como posibles donantes, para hacer un seguimiento de estos casos y una vez que avanzan a la etapa de muerte encefálica, puedan ser donantes.
¿Cuántos procuramientos están haciendo al año?
Históricamente en nuestro hospital iniciamos con procuramientos el 2016, con un total de no más de 2 a 3 donantes al año; luego que partió la unidad el 2022 la cifra de donantes ha ido aumentando, siendo así que en 2023 alcanzamos la cifra de 7 donantes. Esto se traduce aproximadamente en unos 19 trasplantes, porque la mayoría de nuestros donantes son donantes multiorgánicos.
En lo que va de este año 2024 llevamos un total de 6 donantes efectivos.
¿Cómo se enteran ustedes de la cantidad de personas que se beneficiaron por este proceso de procuramiento?
A través de los reportes que recibimos semestralmente desde la Coordinación Local de Procuramiento, que dan cuenta de los órganos que fueron efectivamente trasplantados.
Mencionaste que los donantes son aquellos que fallecieron por causas neurológicas, pero también pueden ser donantes quienes sufrieron ataques cardiacos.
En Chile sí, existe un programa para extraer córneas de personas que fallecen por causa cardiovascular.
También, existe la posibilidad de los donantes vivos, ya que ellos pueden ser donantes de órganos, o parte de ellos, que no afecten su condición de salud, también pueden donar algunos tejidos.
Por ejemplo, tú puedes ser donante de un riñón o de una parte de tu hígado; también se puede donar tejido óseo en los casos de personas que son sometidas a artroplastia de cadera, donde se les saca la cabeza del fémur para instalarles una prótesis, y esa parte del hueso extraído (que se elimina) se puede donar.
Asimismo, en el caso de las mujeres embarazadas, cuando nacen sus bebés por cesárea programada y cumplen con ciertos criterios, se puede donar la membrana amniótica que se extrae de la placenta, que en la mayoría de los casos es eliminada tras el parto.
Ese último proceso es poco conocido, ¿se implementa hace mucho este procedimiento?
A nivel nacional sí, existen centros que lo realizan hace tiempo y en nuestro hospital nos encontramos en la fase final de la implementación del programa de Procuramiento de Membrana Amniótica.
Este es un trabajo muy bonito porque permite que esa membrana (que habitualmente se desecha con la placenta) se pueda extraer y pase por una serie de procesos con los que después le permita ser utilizada como apósitos en el manejo avanzado de heridas, en quemaduras o en lesiones de córneas, por ejemplo.
Está demostrado que su uso tiene múltiples beneficios, ya que permite una recuperación mucho más rápida de las heridas, alivia el dolor, evita infecciones, permitiendo así una mejor recuperación y bienestar para los pacientes, así que estamos muy contentos porque prontamente vamos a poder implementar este programa.
¿La circunstancia más común de la donación en vida es entre familiares, no?
Efectivamente, lo que está establecido es que pueden ser los familiares directos por consanguineidad o los cónyuges, si son compatibles.
Desde 2017, se avanzó a la donación cruzada, donde pueden ingresar a una lista nacional de parejas (donante-receptor) no compatibles, con la posibilidad de hacer el cruce con otras parejas en la misma condición hasta encontrar las que sean compatibles: por ejemplo, si yo necesito un riñón y mi pareja me lo quiere donar, pero no somos compatibles podemos entrar a esta lista donde hacen cruce con otras parejas que tampoco sean compatibles entre ellos, pero sí con nosotros.
¿Qué tan dispuestas se ve a las familias con una donación cuando se trata de menores de edad?
En ese caso, quienes deciden la posibilidad de que ese paciente sea donante son los padres o tutores legales. La frecuencia es más baja en relación a los pacientes mayores de edad.
Sin embargo, cuando ha ocurrido se entiende que hay una aprehensión mucho mayor, por lo que es muy difícil abordar estos casos.
Este año tuvimos el caso de un paciente menor de edad, que falleció en nuestro Hospital y sus padres quisieron acceder a que este niño fuera donante, por lo que estamos tremendamente agradecidos por este gesto tan noble y altruista, lo que sin dudas es muy significativo considerando que también existen muchos niños que se encuentran a la espera de algún órgano para poder mejorar su calidad de vida.
¿En Chile se da el tráfico de órganos?
Desde la información que yo manejo, no existe el tráfico de órganos en nuestro país, porque la ley sanciona con pena de cárcel a quienes sean vinculados con el comercio de órganos o tejidos. En ese sentido, sí puedo dar cuenta del trabajo riguroso que hacemos en este hospital para que se cumplan absolutamente todos los protocolos y lo que está establecido en la ley que regula el proceso de donación de órganos.
Según lo que está establecido, somos garantes de que se cumplan todos los requisitos, desde el minuto en que se identifica un paciente, hasta que se entrega al familiar el cuerpo del fallecido. Cada uno de esos procesos tienen múltiples pasos que se interrelacionan, que están regulados y nosotros nos encargamos de que se cumpla cada uno de ellos.
Dicho lo anterior, refuerzo la importancia que radica en que nos informemos respecto del tema de la donación de órganos y tejidos, para que podamos ir incorporándolo en nuestra cultura como una valiosa oportunidad de que, si se dan las condiciones de ser donantes, puedan ir concretándose cada vez más procesos efectivos que permitan ir en ayuda de tantas personas que hoy se encuentran en la lista de espera de algún órgano para poder continuar viviendo o mejorar significativamente su calidad de vida.
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