En Chile, el fútbol es una pasión arraigada. Se introdujo en 1880 y se convirtió en una moda. La selección chilena es reconocida mundialmente, y los partidos locales son intensos, a menudo terminando en escándalos. Las tradiciones incluyen un estilo de juego agresivo y enfrentamientos emblemáticos entre clubes como Colo-Colo vs. Cobreloa. Los chilenos celebran las victorias con desfiles callejeros y cánticos como “Viva Chile”. Los grupos de aficionados, como Garra Blanca y Los de Abaj, influyen en el ambiente de los partidos, a veces causando problemas. Las emociones son altas y el fútbol es un pilar cultural en Chile.