Hace unos días, la División Gobierno Digital informó de manera interna, pero sin mayores detalles, la grave situación que se generó en el sistema donde desconocidos habrían ingresado de forma ilegal.
Lo que no especificó era que una de las delicadas consecuencias del hackeo fue la sustracción de la base de datos de la Clave Única, herramienta oficial que ha dispuesto el Estado desde hace un tiempo para la realización de trámites vía online y que ha aumentado su uso en el actual contexto de pandemia.
Este hecho fue dado a conocer esta mañana por El Mostrador, en donde no solo se denunció la información entregada de manera parcial por el ente dependiente de la Secretaría General de la Presidencia, sino también la instrucción de parte del Gobierno hacia los diferentes organismos estatales:
«Como parte de las iniciativas que se están desarrollando en el marco del mes de la Ciberseguridad, se iniciará un proceso de promover entre la ciudadanía la actualización de la contraseña de su Clave Única, con miras de fortalecer la seguridad de la identidad digital de los chilenos y chilenas», se leyó en la circular sin relacionar en ningún momento el delito cometido contra el sistema.
Fuentes de la Segpres habrían asegurado a El Mostrador que se trató de una estrategia con el objetivo de «ocultar el impacto y envergadura de la sensible sustracción informática».
Al cierre de esta edición, Gobierno Digital emitió un comunicado en el que segura que existe una investigación en curso y que, hasta el momento, «no existe evidencia de que haya existido acceso a información relacionada a Clave Única».
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