La mayor parte de los alcaldes o alcaldesas que irán a la reelección, ya lo han anunciado con bombos y platillos. Y es que el proceso de elecciones municipales fue movido desde octubre de 2020 a abril de 2021. ¿Qué hará Cathy Barriga?

En ese sentido, y en un contexto de pandemia, las campañas serán cortas y difíciles de ejecutar. Lo anterior, le dará una ventaja significativa a aquellas o aquellos candidatos que ya estén en poder del cargo de alcalde o alcaldesa de una comuna.

Por ello, tiene poco sentido que la alcaldesa de Maipú, la independiente apoyada por la UDI: Cathy Barriga, no haya anunciado ya su decisión de repostular a la alcaldía de la comuna. Poco sentido, siempre y cuando su intención sea el repostularse al cargo, algo que en este tiempo, podría estar dándole vueltas en su cabeza.

Barriga, así lo indican sus cercanos, no lo ha pasado bien en la alcaldía. Tras varios y bullados problemas con la Contraloría General de la República, a la edil, le ha costado comprender como funcionan las instituciones, y ha simplificados los errores que se le atañen a su gestión, a persecusiones políticas, o simplemente que «le tienen mala».

Sin embargo, más allá de lo que Barriga pueda creer, o de la forma en que interprete la realidad, lo cierto es que el éxito de una eventual repostulación, dependerá -en gran medida- de la capacidad o incapacidad que tengan las fuerzas de centro izquierda, para organizarse en torno a conseguir un candidato a candidata única para la elección.

Recordemos que el triunfo de Barriga, fue posible única y exclusivamente, debido a que el alcalde en ejercicio: Christian Vittori, decidió competir como independiente, pues el que era su partido: la DC, decidió no apoyarlo por estar imputado en el denominado caso basura.

En una elección, en la que la Nueva Mayoría, apostó por Freddy Campusano (en ese entonces DC), y Vittori corrió por fuera. Además que la izquierda presentó a Claudia Mix (hoy diputada), los votos se dispersaron de manera tal, que nadie fue capaz de ganarle, aunque la suma de los tres candidatos, pulverizaba la votación de Barriga.

De hecho, si se analiza el resultado electoral de las municipales 2012, se aprecia que Joaquín Lavín León, hoy diputado y marido de Barriga, obtuvo 34,15% de los votos, perdiendo ante Vittori que pasó el umbral del 50% (en total obtuvo un 53.26%)

En el año 2016, Barriga obtuvo 35.203 votos (menos 3743 votos que su marido en las municipales de 2012), pero ante las candidaturas de Campusano y Vittori (ambas obtuvieron en conjunto 47.655 votos), Barriga logró ganar la elección.

Hoy día la conveniencia para Barriga, está en que la centro izquierda vuelva a cometer el error histórico de ir dividida. Por ello, los equipos políticos de la exConsejera Regional, analizan los escenarios que podría enfrentar la alcaldesa de Maipú.

Si la centroizquierda se pone de acuerdo en torno a una candidatura, electa -por ejemplo- vía primarias ciudadanas, el camino de Barriga está cuesta arriba.

Por ello, el silencio de nuestra alcaldesa se explica desde la táctica política electoral. Aunque reniegue de la política, hoy depende de ella para ver si repostular o buscar nuevos horizontes.

¿Y usted vecina y vecino? ¿Quiere que Barriga siga o prefiere que Barriga pare?